Anabel tiene 18 años y vive con su madre, Delia, una taxista chilena emigrada al barrio de Collblanc hace veinte años. Estudia primero de comunicación audiovisual en la ciudad de Barcelona. Le costó mucho esfuerzo entrar en la carrera, pero ahora su futuro está a punto de cambiar. Y es que aunque Anabel todavía no lo sepa, una carta está a punto de llegar.
"Deslumbrante confirmación de Belén Funes (...) 'Los Tortuga' es, desde ya, la revelación del Festival de Málaga en curso por su capacidad para la reflexión y el asombro, para la cólera y la serenidad, para la furia y el sueño."
Luis Martínez: Diario El Mundo
"Belén Funes confirma que es una voz única en el cine español (...) La cineasta arma un drama sobre madres e hijas, duelos y precariedad, campos de olivos y desahucios, en el que demuestra, una vez más, la rigurosa mirada de un cine social en el que todo está conectado"
Pepa Blanes: Cadena SER
"Esta oda inicial a la recogida de aceitunas y drama intimista y psicológico después la sigo con relativo interés, sin querer escaparme todo el rato de lo que veo y escucho, sin mirar continuamente el reloj, pero sin ninguna pasión."
Carlos Boyero: Diario El País
"Con una cámara ligera e invisible, (...) Funes acompaña a una madre y a su hija (...) Lo hace con verdad, midiendo las emociones y permitiéndoles equivocarse. Al hacerlo, esos temas también nos atraviesan a nosotros. (...) Puntuación: ★★★★ (sobre 5)"
Desirée de Fez: Diario El Periódico
"Levanta acta del viaje emocional de sus protagonistas, alejándose de las obvias influencias estéticas de “La hija de un ladrón” para construir una película más serena, acaso menos enfadada, pero igualmente intensa (...) Puntuación: ★★★★ (sobre 5)"
Sergi Sánchez: Diario La Razón
"Una de las grandes películas españolas del año (...) modélico guion (...) Para aquellos que busquen un cine social alejado de clichés y estereotipos (...) Puntuación: ★★★★ (sobre 5)"
Beatriz Martínez: Fotogramas
"Tanto Funes, como su coguionista Marçal Cebrian, han salido mucho más que airosos (...) Una emocionante demostración de que lo íntimo y lo político son inseparables. (...) Puntuación: ★★★★ (sobre 5)"